Irene Papas. In memoriam

En la mañana del 14 de septiembre de 2022, antes de que la noticia saltase a los medios de comunicación nacionales e internacionales, me comunicaba desde Atenas Manolis Manousakis que, al fin, después de una penosa enfermedad que la había desconectado del mundo exterior, su tía abuela, la actriz griega Irene Papas, descansaba en paz. Rodeada de sus seres queridos, acompañada por unos pocos amigos, se despedía su cuerpo en la iglesia de San Jorge, en su pueblecito natal de Jiliomodi, entre salmodias bizantinas entonadas por Spyros Pavlakis, como ella misma quería. A partir de ese momento, auténtico dies natalis para los creyentes ortodoxos, se despedía a la gran mujer, pero renacía con más fuerza todavía el mito de una de las mayores artistas e intelectuales que haya podido darnos Grecia en el siglo XX.

Obituario de Alejandro Valverde García